Leonardo, director deportivo del PSG, puede ser sancionado hasta un año de toda función oficial por haber empujado al árbitro del encuentro que su equipo jugó el pasado domingo contra el Valenciennes.
El caso será analizado por la Comisión de Disciplina de la Federación Francesa de Fútbol (FFF), que según los reglamentos también puede decidir quitar dos puntos al PSG por esa acción.
"Soy yo el que fui agredido", afirmaba Leonardo.
El delegado del encuentro, niega la versión de Leonardo y asegura que "en 20 años nunca había visto tanta violencia" contra un colegiado.
El árbitro, por su parte, redactó un informe relatando los hechos, cuyo contenido no ha sido desvelado.
"No sé por qué le han dado un partido tan importante. Estaba lejos de las jugadas, se ha dejado llevar por la emoción, estaba tenso, ha perdido el control. La autoridad te la ganas con la competencia, no con las tarjetas", dijo.
El colegiado del encuentro, Alexandre Castro, había pasado cuatro meses sin arbitrar a causa de problemas de salud, lo que para Leonardo es motivo suficiente para considerar que no tenía la categoría suficiente para dirigir un encuentro tan importante.
"Nos estamos jugando la liga y ponen a un árbitro así".
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