“Mi función consistirá en transmitir, desde la experiencia, mis conocimientos con la intención de hacer más profesional al futbolista. Quiero ser un coaching que ayuda a pensar, a tomar decisiones, a gestionar con inteligencia las emociones en situaciones complejas”, explicó el propio Carles en una entrevista concedida a Ramon Besa en El País.
Puyol empezará esta etapa a lo grande, ya que su primer fichaje es, nada más y nada menos, un futbolista del primer equipo del Barça, Marc Bartra. El pasado viernes, el diario As ya adelantó que ‘Puyi’ estaba tratando de convencer a Aymeric Laporte, central del Athletic, y que otro de sus objetivos era Bartra. Mundo Deportivo puede confirmar que Puyol y Bartra ya han llegado a un acuerdo y que el central ya se lo ha comunicado a su anterior representante, Mágico Díaz, que ha llevado los asuntos de Marc desde que tenía 15 años, es decir, los últimos nueve.
Mágico Díaz, uno de los representantes más respetados en la profesión, mantiene con sus jugadores una relación muy cercana, de máxima confianza y amistad, y es de los pocos, poquísimos, que no firma ningún contrato con ellos. Es por ello que en los próximos días las dos agencias podrían reunirse para establecer los términos del cambio, ya que todos los actuales contratos de Bartra, sobre todo los deportivos con el Barça, los ha negociado Mágico.
Tras la decepción de quedar fuera de la convocatoria del Clásico, Bartra desea iniciar un nuevo ciclo deportivo en compañía de Puyol. La principal incógnita es si será en el Barça (Puyol le convenció hace dos veranos que se quedara) o en otros clubs que están interesados en él. Uno de ellos podría ser el Manchester United, que busca centrales y está dirigido por un buen amigo de Puyol, Louis van Gaal.
Otro de los nombres que están en la órbita de Puyol, Laporte, también le dará el ‘sí’, según ha podido saber MD, tras rechazar otras propuestas de agentes como Ginés Carvajal, Arturo Canales o Pere Guardiola. La relación Laporte-Puyol no tiene por qué significar que el central acabe en el Barça, ya que su cláusula de rescisión, de 50 millones de euros, solo está al alcance de los grandes de la Premier, el Chelsea y los dos clubs de Manchester, United y City. Y Javi Martínez, Fernando Llorente y Ander Herrera ya saben que, de rebajas, el Athletic, últimamente pocas.
