En dos años la F1 ha 'perdido' a cuatro excelentes pilotos, muy jóvenes y prometedores, como Jaime Alguersuari, Sebastien Buemi, Timo Glock, Heikki Kovalainen. Los nombrados si han logrado debutar y puntuar, pero hay muchos otros que ni siquiera pudieron. "No debería haber pilotos que paguen para correr en F1. Demasiados buenos pilotos se han quedado sin volante porque ha llegado otro con dinero y es algo que me entristece", dijo Martin Whitmarsh, director de McLaren.
Es cierto que siempre ha habido pilotos de pago, antes compraban un coche y corrían e incluso alguno financió un nuevo equipo o construyó coche propio, "pero su número es excesivo. Será muy importante y emocionante para ellos, pero no deberían tener lugar en la F1", admite Whitmarsh.
Monisha Kalterborn, principal de Sauber, dice que "muchos equipos están en delicada situación financiera".
Es decir, o admiten pilotos de pago o su competitividad se resiente. Y en la F1 actual, un buen coche marca diferencias superiores a las que marcan los pilotos.
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