"Tenemos una relación profesional, no seremos grandes amigos para hacer cosas personales como ir a cenar juntos o tomar una copa... aunque ahora me acuerdo que en la última concentración de la selección tuvimos un día libre y 4 o 5 jugadores salimos a tomar una copa juntos y uno de ellos era Arbeloa, o sea que es todo más normal de lo que parece".
Su futuro: Hace un par de años dijo que "algún día me gustaría ser presidente del Barça", y no ha cambiado de idea: "Podría ser un objetivo, presidir el mejor club del siglo XXI, pero queda mucho recorrido. Sí puedo decir que ahora mismo me hace más ilusión ser presidente que entrenador".
¿Jugarás hasta más allá de los 34 años?: "Si hasta lo 35 tengo que pasar todo lo de Puyol", dijo entre bromas. pero reconoció que "a mí no me veréis. Él es de otra pasta". Sergio Busquets dijo esta semana que no, a la misma pregunta.
Su dedicación al fútbol: "Soy un gran profesional que he mejorado con los años, el primer año quizás no lo era tanto, pero que la gente tenga claro que nunca haré nada que pueda perjudicar mi carrera".
El estilo de juego del Barça: "El debate continuo no nos ayuda". "No estamos jugando como queremos, tenemos un nivel más alto, pero no estamos jugando tan mal como la gente dice. Hay que hacer autocrítica y jugar mejor. Los resultados son buenos y te dan confianza".
El juego de toque tradicional del Barça: "No le encandila a todo el mundo, como dijo Klopp. No nos engañemos, no gustamos a todo el mundo". Y en cualquier caso pidió paciencia: "El juego no irá a peor, irá a mejor seguro".
Autor de las frase: "Éramos esclavos del tiki-taka", Gerard matizó que "de tanto exagerar una forma de jugar que había funcionado muy bien, llegamos a ser muy previsibles. Nos dimos cuenta de que sólo la posesión no te hace ganar partidos. Pero no jugamos tan diferente, si podemos hacer posesiones largas, lo hacemos".
La rotaciones de Martino: "Nos están dando mucha vida, llegaremos al final de temporada muy frescos".
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