Muchos entrenadores pidieron a Pep Guardiola seguir de cerca un entrenamiento suyo cuando en los momentos del 'boom' de su Barça, por lo que esos técnicos, se reunieron con él en su despacho, en los entrenamientos para conocer sus métodos, sus formas de trabajo... El Tata Martino no fue uno de ellos. Es tan discreto que prefirió viajar a Barcelona de incógnito para ver partidos del Barcelona. Durante sus vacaciones, después de dejar la selección de Paraguay y antes de coger al Newell's, pagó entradas para ver, el Gamper del 2011 cuando el Barcelona se enfrentó al Nápoles (5-0).
El staff del club le dijo: "Pero como no nos llamaste que te hubiéramos buscado un buen sitio". El no quiso molestar sino de pasar inadvertido. Hoy ese hombre pasará a sentarse en el banquillo y debutará como entrenador del equipo en el Camp Nou en un Gamper.
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