Pero por ahora piensa en su actual equipo y en hacer "un grandísimo año" y espera que "le salgan bien las cosas".
En el equipo italiano se ha reencontrado con su técnico Rafa Benítez, con el que ya coincidió en el equipo inglés: "Rafa Benítez es el mejor entrenador que he tenido en mi carrera. Me hacía mucha ilusión volver a compartir vestuario con él. Había un gran proyecto encima de la mesa, de seguir creciendo y de hacer las cosas bien. Para mí era una oportunidad de volver a luchar por títulos".
Sobre su futuro dijo que "no es imposible que me quede en el Nápoles". Y al final de temporada tendrá que regresar a Liverpool y entonces "será el momento de tomar una decisión".
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