Andrés Iniesta estrenó anoche la cuarta temporada del programa 'El Convidat', de TV3, donde habló casi una hora, con periodista Albert Om en el entorno del jugadorm Fuentealbilla; su casa, su familia, sus amigos y vecinos. Iniesta mostró sus lugares del pueblo manchego: la estatua que se inauguró este verano, la Penya Barcelonista que lleva su nombre, el columpio donde juega con su hija Valeria, la pista polideportiva de su colegio infantil y donde jugó un partidillo con los críos de hoy, su viñedo, el Bar Luján de su abuelo que “él ha convertido en mi museo”, la casa en la calle Iniesta nº1 y una foto con Pep Guardiola y él de niño en el recibidor.
Su renovación: Su ilusión es acabar su carrera en el Barça. "No sé qué pasará en el futuro, me gusta mirar muy cerca, pero mi sentimiento desde siempre es acabar mi carrera en el Barça. Para mí sería muy bonito.
Veremos.... me quedan dos años de contrato. Esperemos que todo vaya por buen camino, es mi deseo y espero que el de la gente del club".
Su esposa Anna: "Si por Andrés fuera, hasta los 40 años estaría jugando al fútbol".
Su casa: Llena de motivos culés, Iniesta bromeó: "Será mejor no cambiar de equipo porque toda la casa está en función del Barça".
Los partidos: "Cada partido lo vuelve a ver en casa porque soy muy cabezota". "Antes era peor, fallaba dos pases y no dormía en toda la noche".
Iniesta llora por el fútbol: Confesó haber "llorado por el fútbol, por ejemplo en la Copa que perdimos en Valencia contra el Madrid". Sobre todo, "en abril de 2010, un año muy complicado para mí por la lesión, me sentí hundido, era no salir del túnel".
Crackovia: "Al principio la imitación que hacen de mi en 'Crackovia' no me gustó, pero luego entendí que cada parodia tiene su exageración".
Catalunya y España: "Nací en Fuentealbilla y crecí en Catalunya. No es incompatible sentirte de un sitio y de otro. Para mí es algo tan lógico que se hace difícil que no se entienda. No creo que sea incompatible sentirte español y jugar en el Barça o catalán y jugar con España. Cuando impera el respeto todo es mas fácil de entender".
La sorpresa: La piscina de su casa con el escudo del Barça "y un ritual obligado para todo aquel que se quiera bañar; besar el escudo". "Si no, no te bañas aquí". Iniesta despidió el programa sumergiéndose en la pileta para besar el escudo.
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